Tengo solo dos amores.

Tengo dos amores, de la misma intensidad,
los dos me roban poca vida y me dan mucha más.
A uno de ellos le ayudo a aprender a volar,
el otro vuela conmigo.

Los dos son, todo lo libres que puedo,
son todo lo que quiero, toda mi libertad,
Mis amores son todo.

Son una noche de estrellas, de luz de luna,
de sombras, de siluetas, de sonidos, de destellos,
de mares, de descanso…

Son un día de nubes, de rayos de sol,
de reflejos, de gestos, de olores, de espumas,
de tierras, de sueños…

Mis dos amores, son todas las noches,
son todos los días.

Los dos son el calor.
Son todos mis amores.

Tengo solo dos amores,
Todo lo demás es muy poco,
Todo lo demás soy yo.
Mis letras, se apagan perezosas,
como despues de un cielo en llamas,
se ponen solo en negro,
pierden la sonrisa,
de cientos de miles de lunas,
que escuchan aguas,
que bajan arrebatadas,
como instrumentos afilados,
que cortan los recuerdos.

Mis letras languidecen,
perdidas en el mar,
en mareas, en estrellas,
se pieden en rojo,
en muchos labios,
en sentir lo exacto,
se enredan inquietas,
olvidan.

Mis letras, se escapan,
entre tierras que se descubren fecundas,
vivas, eternas, entre corolarios viejos,
escondidos, enfermos, espesos, sin alma.

Mis letras, no tocan cielo,
no impulsan sueños,
pierden sus alas,
se confunden en rastros gruesos.

Mi letras, se dejan morir,
si no acarician tierra profunda,
con llagas, ríos ciegos, cuevas verdes.

Mis letras no dan más de si,
en mis sueños de mi octubre,
esperan versos con versos.

Si no, perezosas cambiaran de mes, de estación,
volverán a ser solo tinta.
una vez más.

Beso


Susurros cabalgando en la luz del ocaso,
alas soplándolos al oído,
reflejos salpicando de espuma la piel,
siluetas que se resisten a cerrar los sentidos,
palabras que se pierden en un milímetro de sombra.


Espacio escapando del abrazo,
sueño de la consciencia perdida,
almas rendidas, entregadas,
un milímetro, cuatro labios,
un beso.